stardust

viernes, 16 de noviembre de 2007

POEMAS

No quiero pensar en nada más,
ya no me soborna esa idea de abandonar.
Seguiré bailando sólo para tí
encadenando mi cuerpo
que es capaz de volar,
en un eterno silencio
justo antes de despertar.



Qué podría escribir,
si mis manos se deslizan sin que mis ideas las ordenen.
Esa mirada presente en todas las huellas del tiempo,
presentes esos ojos que hacen que me envenene.
Sintiendo en mis carnes cómo me aplasta tu cuerpo,
conciente de aquello que a mi mente mantiene,
que el morador de mi cuerpo
esta vez se hace el dueño,
erizando con aliento
toda piel que no logra erizar el viento,
y no conformándose con ello,
parece que ante su recuerdo el mundo se detiene.
Viva todavía, aunque sin poder vencer al tiempo,
inconciente de lo que no se tiene,
vendido el corazón y recio el cuerpo,
para tí y para siempre,
aquí me tienes.


Necesito ahogar la angustia que siento adentro.
El lápiz y el papel es la única salida que encuentro.
Todo a mi alrededor es confuso y lento,
sufro por los demás y me apago por dentro.
El deseo de felicidad y el agobio del tiempo.
Gente que alberga vida y por fuera están muertos.
Personas, fábricas de un bienestar no cierto,
creyéndose capaces de todo cuando no tienen derecho.
De qué me sirve sentirme viva
cuando todo a mi alrededor está muerto.



Embárcate en el navío que no anclará en puerto.
Únete al sonido leve y pretencioso del viento.
Alcanza el prado de flores lilas y fondo verde.
Siente la arena del desierto formando parte de tí.
Sumérgete en las olas de un mar infinito y rebelde.
Vive una vida de la que nada te importa el fin,
acariciando el sol que roza tu cuerpo con reflejos de color agutí,
sintiendo la libertad en un espejo
en el que no te ves a tí.



No dejes que tu corazón se acostumbre a olvidar,
podrías dejar pasar cosas que no estás seguro querer hacerlo.
Es estimulante tener miedo a que algo pueda acabar,
sobre todo cuando ese algo puede que no vuelvas a tenerlo.
A veces creemos las cosas más fáciles de lo que son en realidad,
pero cuando se trata del corazón,
es difícil pensar con claridad.
Y si algo te hace sentir como nunca te habías sentido,
porfavor, no dejes que se convierta en tiempo perdido.